Hoy vamos a preparar un delicioso arroz con setas y butifarra, una receta reconfortante y llena de sabor que seguramente encantará a toda la familia. Las setas aportan un toque terroso y las butifarras le dan ese toque ahumado y jugoso que hace de este plato una auténtica delicia. Así que vamos a ponernos el delantal y manos a la obra.
Ingredientes
– 2 tazas de arroz
– 1 cebolla picada
– 2 dientes de ajo picados
– 200g de butifarra cortada en rodajas
– 250g de setas variadas (champiñones, boletus, setas de ostra, etc.)
– 1 litro de caldo de pollo
– Sal y pimienta al gusto
– Aceite de oliva
Elaboración
1. En una sartén grande, calentamos un par de cucharadas de aceite de oliva a fuego medio-alto. Añadimos la cebolla y el ajo picados y sofreímos hasta que estén dorados y fragantes.
2. Incorporamos las rodajas de butifarra a la sartén y las cocinamos hasta que estén doradas por ambos lados. Retiramos la butifarra de la sartén y reservamos.
3. A continuación, añadimos las setas a la sartén y las salteamos hasta que estén doradas y hayan liberado sus jugos. Es importante no revolver las setas con demasiada frecuencia, ya que esto evitará que se doren adecuadamente.
4. Mientras las setas se cocinan, en otra olla calentamos el caldo de pollo hasta que esté caliente pero no hirviendo. Mantenemos el caldo caliente durante todo el proceso de cocción del arroz.
5. Una vez que las setas estén doradas, agregamos el arroz a la sartén y lo sofreímos durante unos minutos, revolviendo constantemente, hasta que los granos de arroz estén ligeramente dorados.
6. Entonces, añadimos una taza de caldo caliente a la sartén y revolvemos suavemente. Cocinamos el arroz a fuego medio, añadiendo más caldo a medida que se va absorbiendo, hasta que esté tierno pero aún firme en el centro.
7. Por último, incorporamos la butifarra dorada a la sartén y mezclamos suavemente. Rectificamos la sazón con sal y pimienta al gusto.
8. Retiramos la sartén del fuego y dejamos reposar el arroz durante unos minutos antes de servir.
Sirve el arroz con setas y butifarra bien caliente, espolvoreado con un poco de perejil fresco picado para darle un toque de frescura. Este plato es perfecto para compartir en una comida familiar o para disfrutar en una tranquila noche de entre semana. ¡Buen provecho!